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Más de 4 millones de niños mexicanos en extrema vulnerabilidad

De acuerdo con World Vision México, de los 38.2 millones de niños y niñas que habitan en el país, 4.5 millones viven en condiciones de vulnerabilidad extrema, situación que “no solo impacta su presente, sino que también amenaza su desarrollo integral y su capacidad para escapar del ciclo de pobreza en el que se encuentran”.

La organización explicó que, la vulnerabilidad infantil es una de las preocupaciones más críticas en el país y destacó que, esa situación ocurre cuando los menores carecen de acceso a recursos básicos para su desarrollo, como educación, salud y seguridad social. WVM destacó que las entidades con más niños vulnerables son:

  1. Chiapas en primer lugar con 711 mil 736 menores vulnerables.
  2. Estado de México, con 669 mil 429 menores.
  3. Veracruz con 437 mil 155 casos.
  4. Guerrero con 389 mil 509 niños vulnerables.
  5. Oaxaca con 367 mil 993 casos.

Estas cifras no son solo números, sino vidas que enfrentan barreras insuperables. Los datos muestran un vínculo claro entre la pobreza y la falta de oportunidades”, dijo el organismo y agregó que, en hogares con una jefa de familia los infantes sufren más de tres carencias sociales como salud, seguridad social y alimentación nutritiva.

Sin embargo, la situación es peor para los menores de cinco años y que pertenecen a comunidades indígenas, donde la vulnerabilidad es “desproporcionadamente alta” y el acceso a servicios básicos es limitado. “A medida que disminuye el nivel educativo del jefe del hogar, se incrementa la precariedad en la que viven las niñas y niños.

Además, WVM explicó que, esos factores sumados a la falta de políticas públicas efectivas, hacen que los niños en entornos rurales vivan en exclusión y abandono. “La violencia es un factor devastador en la vida de estos niños”, pues son víctimas de violencia física, psicológica, sexual y económica, lo que se agrava su condición.

Es decir, la pobreza que afecta a la niñez mexicana no se mide únicamente por el dinero, sino por el acceso desigual a los recursos esenciales que determinan su calidad de vida”, dijo WVM y agregó que, los menores que crecen en hogares pobres enfrentan desventajas estructurales que afectan su salud física y mental, educación  oportunidades.

Por otra parte, WVM indicó que, el cambio climático es un factor que añade una capa más de vulnerabilidad en las zonas rurales, pues las sequías, desastres naturales y pérdida de medios de vida afectan a las comunidades más marginadas, donde miles de niños y niñas sufren las consecuencias de hambre, falta de medicinas y sin educación.

“La vulnerabilidad infantil en México no es solo un tema de cifras; son millones de vidas que están en juego. Si no tomamos acciones contundentes, menores y adolescentes seguirán atrapados en un ciclo de pobreza que condiciona su presente y compromete su futuro,” dijo Malcom Aquiles, director de Incidencia en Políticas Públicas y Movilización de WVM.

Finalmente, WVM agregó que, la situación de vulnerabilidad que enfrenta la niñez en México exige una respuesta integral y colaborativa, por lo que el trabajo conjunto entre el gobierno, las empresas privadas y la sociedad civil es esencial para transformar esa realidad, con políticas públicas más inclusivas, el compromiso del sector privado y la participación activa de la población.

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